¿el fin de un nefasto?

Ayer leía -no con cierto regocijo- que un personaje a todas luces nefasto para lo que significa la convivencia de nuestra sociedad, había renunciado a su puesto (no, no es Felipe Calderón) por cuestiones de edad.

http://www.eluniversal.com.mx/notas/814361.html

Sin embargo y a semejanza de los monstruos mitológicos griegos, este personaje se niega a morir y "puntualizó que él seguirá como administrador apostólico de la Arquidiócesis de Guadalajara, según lo contempla la legislación eclesiástica en su Código de Derecho Canónico."

Guadalajara y la Ciudad de México deberían ser declaradas ciudades hermanas (en la desgracia)

La primera tiene a Juan Sandoval y la segunda -gulp- al mismísmo Norberto Rivera

Buaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

Tambien a la playa junto con Montiel